Tod@s hemos sidos lastimados en algún momento, ya sea en el amor, la familia o el trabajo. Incluso, a veces, la más pequeña púa puede herirnos profundamente, de modo que este ritual está pensado para una reconstrucción lenta, tanto para depositar de nuevo la confianza en la persona que nos ha traicionado como en otras situaciones diferentes.
Si podemos, comenzaremos el ritual por la mañana, justo cuando amanezca.
Tomaremos un recipiente con hielo o nieve. Si estamos en un lugar de clima cálido, podemos utilizar cubitos de hielo.
Colocaremos algunas adularias o amatistas en un vaso de cristal transparente, lo cubriremos con hielo y lo colocaremos en un lugar frío.
Encenderemos una vela de color pálido (el azul es bueno para curarnos de una traición, el rosa para asuntos familiares y el verde para el amor) y diremos en voz alta:
"Arde vela, arde. Funde el hielo que ha crecido en torno a mi corazón y deja que la vida fluya."
Seguidamente, plantaremos un esqueje de albahaca o algunas semillas en una maceta de barro. Al colocar nuestras manos sobre la tierra, recitaremos en voz alta:
"Entierro el dolor, la ira, la traición, y planto las semillas de la esperanza."
Cuando el hielo se derrita y, poco a poco, vaya apareciendo el agua, lo removeremos diciendo:
"Fluid, aguas, fluid hacia una nueva vida, confianza y alegría".
Dejaremos que el hielo se vaya derritiendo a su ritmo y mientras, nos dedicaremos a otras tareas positivas como, por ejemplo, ordenar un cajón desordenado, solucionar problemas domésticos, etc.
Cuando el hielo se haya convertido en agua, verteremos un poco de este agua sobre la planta o las semillas y diremos:
"Crece, esperanza, crece para que mi confianza pueda dar fruto."
El resto del agua la usaremos para regar las plantas de nuestro balcón, terraza o jardín y dejaremos que la vela se apague enviando la luz a aquel o aquella que nos haya hecho daño o nos haya traicionado, consciente o inconscientemente.
***Bibliografía:
-"Guia completa de Magia y Rituales" de Cassandra Eason. OcéanoAmbar.