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En la actualidad, viajamos mucho. Lo hacemos por trabajo y por placer. Coches, trenes y aviones se convierten en elementos indispensables para nuestros desplazamientos y por ello debemos protegernos ante cualquier imprevisto que pueda surgir en los trayectos.
Este ritual que encontraréis a continuación tiene como finalidad tener un viaje agradable y favorable.
En nuestra sociedad, el coche se usa como instrumento de trabajo usualmente. Comerciales, taxistas, empresarios, etc. prefieren este transporte particular para sus cuestiones laborales en lugar de hacerlo en sistemas colectivos pero son conscientes del peligro y el cansancio que, en cualquier instante, puede encerrar la carretera.
Esta magia con sal potenciará que sus viajes sean gratos, relajados y sin contratiempos, favoreciéndo además que el conductor mantenga presente la prudencia y la atención.
Ingredientes que precisaremos:
-Tela amarilla
-Tinta morada
-Un cordón morado o amarillo
-Una prenda personal
-Esencia de pino
-Una vela amarilla
-Papel blanco
-Sal
En primer lugar, confeccionaremos una bolsita de tela amarilla en cuyo centro pintaremos con tinta morada una estrella de cinco puntas. Una vez realizada la bolsa, impregnaremos una pequeña prenda personal limpia, sobre todo, con esencia de pino. Esta prenda puede ser un pañuelo, el bolsillo de una camisa vieja, un calcetín de color claro, etc.
Cuando la prenda esté bien humedecida, mojaremos el dedo índice de la mano derecha en el agua y después lo meteremos en un salero con sal fina y marcaremos sobre la prenda una cruz junto a nuestras iniciales del nombre y nuestros apellidos. A continuación, introduciremos la pieza de ropa en el interior de la bolsa.
Seguidamente, con una cerilla de madera prenderemos la vela amarilla y pediremos protección con las palabras que nosotr@s mism@s escojamos, encomendándonos a la Energía Universal, a la Diosa, etc.
Dejaremos que arda durante cinco minutos y, entonces, derramaremos diez gotas de cera en un papel blanco y cuando éste se haya secado lo introduciremos en la bolsa de tela que hemos fabricado.
Cerraremos la bolsa con nueve nudos y ya estará lista para ser usada. Siempre la mantendremos en un lugar cercano al conductor del vehículo. Ese lugar no debe estar a la vista necesariamente pero no debe mezclarse con otros objetos tales como mapas o guías.
Este ritual debe renovarse en cada nueva estación del año, es decir, en los Solsticios y en los Equinoccios.
Es importante que antes y después de la realización del ritual nos demos una ducha purificadora con sal, ruda, mirra o lavanda.
Que la Diosa nos guíe y nos ilumine siempre !!!
Dejaremos que arda durante cinco minutos y, entonces, derramaremos diez gotas de cera en un papel blanco y cuando éste se haya secado lo introduciremos en la bolsa de tela que hemos fabricado.
Cerraremos la bolsa con nueve nudos y ya estará lista para ser usada. Siempre la mantendremos en un lugar cercano al conductor del vehículo. Ese lugar no debe estar a la vista necesariamente pero no debe mezclarse con otros objetos tales como mapas o guías.
Este ritual debe renovarse en cada nueva estación del año, es decir, en los Solsticios y en los Equinoccios.
Es importante que antes y después de la realización del ritual nos demos una ducha purificadora con sal, ruda, mirra o lavanda.
Que la Diosa nos guíe y nos ilumine siempre !!!
*** Bibliografía:
-"Sal Mágica. Hechizos, Conjuros y Rituales Protectores" de Adriana Magali. Colección "La Otra Magia". Ediciones Karma.7
2 comentarios:
si mal no recuerdo usted dice que hay un ritual muy viejo qeu es colocar dos espigas de trigo cruzadas arriba del marco de la puerta principal, pero no aclara si es del lado de adentro o afuera de la casa y si hay que cruzarlos en forma de cruz o no importa como siempre que esten cruzadas. por favor contesteme cuanto antes
Estimada Fernanda,
Se colocan por la parte interior de la casa (siempre por el lado de adentro) y no tienen porqué formar una cruz. Tan sólo las enlazas como mejor te parezca.
Espero haberte ayudado!
Bendiciones !!!
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